Un grupo de transportistas en el sector de Veranillo, ante la mirada de decenas de policías, por poco linchan al abogado Justino González, autoridades y a los propietarios de una finca en donde se debía cumplir una orden de desalojo.
Los transportistas no permitieron que se realizara la acción judicial y gritaban toda clase de improperios y obscenidades al abogado y a los acompañantes. La acción motivó la paralización del transporte en el sector de Veranillo, que luego fue restablecido.
Los buseros de la ruta de Veranillo se quejaron de la orden de desalojo de la piquera, por lo que decidieron no transportar a los cientos de pasajeros que utilizan esta ruta. Los transportistas habían bloqueado, además, la calle frente a la piquera con piedras como medida de protesta.
En medio de empujones y gritos, el abogado González y su cliente, el empresario Roberto Grajales, fueron sacados de la piquera de Veranillo, frente a la mirada de las unidades de la Policía Nacional.
Los transportistas no aceptaron hablar con González, ya que alegan que su representante (Grajales) no es el dueño de los terrenos que han ocupado por más de treinta años.
DETALLES
Diálogo Representantes de la piquera se dirigieron posteriormente a la Alcaldía de San Miguelito para encontrar solución a este hecho.