La barriada 9 de Enero está nuevamente sumergida. Las lluvias de ayer volvieron a inundar las casas. El problema es que el alcantarillado de metal ha colapsado por la basura y el óxido.
Siete casas estaban ayer casi hasta el techo en agua. La historia se repitió en espiral y con agua. Los residentes volvieron a vivir la pesadilla que habían enfrentado hace 12 días. La única solución ahora es mudarse.