Aunque Panamá ha realizado esfuerzos en el combate a la trata de personas, aún no cumple con los estándares mínimos para su erradicación, según el último informe del Departamento de Estado de Estados Unidos que monitorea los avances de diversos países en la lucha contra este delito.
El documento destaca que Panamá promulgó una ley contra este delito, y que conforme a esa ley la PTJ investigó 24 casos de trata de personas, cuatro veces más casos que en 2003.
La principal deficiencia del gobierno de Panamá, según el informe, es que aún no ha eliminado un programa de visas que facilita la entrada de mujeres extranjeras para la prostitución, que posiblemente es explotado por traficantes.
Además, define a Panamá como "un país de origen, tránsito y destino para hombres, mujeres y niños objeto de la trata de personas para trabajo y explotación sexual".