El Tribunal Supremo de Estados Unidos aceptó estudiar si las cortes federales pueden escuchar las apelaciones de algunos prisioneros en la base estadounidense de Guantánamo (Cuba), que han protestado en contra de su encarcelamiento, informaron fuentes judiciales.
Esta decisión supone un revés para la Administración Bush, que siempre ha defendido que los tribunales de justicia civiles no tenían jurisdicción para estos casos.
En abril el Supremo rechazó una petición similar, aunque en la comunicación realizada ayer no indica la razón por la cual ha cambiado de opinión.