Sebastián (ficticio), tuvo algo que a una gran mayoría de hombres y mujeres les pasa. Enamorados de su profesor o profesora.
"Ella era y sigue siendo guapa. Todos teníamos que ver con su elegancia", dijo Sebastián.
"El día de la graduación me le declaré. Ella me correspondió, pero de otra forma", asegura. Me dijo algo como "también me gusta mucho tu interés en los estudios". Jooo, que respuesta.
NO SIEMPRE ES BUENO
Para Carlos, el enamorarse de una compañera de clases fue lo peor que le pudo suceder. Según él, la chica lo utilizó para conseguir estar cerca de otro hombre (su mejor amigo).
En ese entonces, Carlos tenía 14 años y la chica 16. Era tanto el cariño por ella, que del pago que le dieron por su beca le compró un collar a la chica.
Después vinieron los problemas entre ellos. A los días vio a su amigo con el collar que con esfuerzo le había regalado.
"Juré que me las pagaría, pero aún no me la he cobrado", asegura Carlos.
�CUIDADO!
Si ya has pasado por eso, Amén. Pero si todavía no lo has experimentado, no sabes lo que te has perdido.
Sin dudas, esta es una linda experiencia, si las has sabido vivir; pero si no, !que lío!