El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, insistió en que esperará a septiembre para tomar una decisión sobre su estrategia en Irak, después de que un informe mostrara que los logros hasta ahora han sido limitados.
Bush ofreció una rueda de prensa en la Casa Blanca para tratar sobre el informe preliminar que fue entregado al Congreso, que considera que de las 18 metas que el Gobierno de Irak tenía que cumplir, sólo ha habido progresos en ocho áreas.
En otras ocho áreas queda aún mucho por hacer y en las dos áreas restantes los resultados son demasiado mixtos como para pronunciarse, según el informe de la Casa Blanca, que también advierte de posibles atentados de gravedad de la red terrorista Al-Qaeda antes de septiembre.
El informe definitivo sobre la situación en el país árabe, elaborado por el comandante en jefe de las tropas de Estados Unidos en Irak, el general David Petraeus, y el embajador estadounidense en Bagdad, Ryan Crocker, debe presentarse el 15 de septiembre próximo.
Bush afirmó que el cumplimiento de ocho metas -sobre todo, las que afectan a la seguridad- deben ser "causa para el optimismo", aunque reconoció que los objetivos políticos distan aún mucho de alcanzarse.