Ya las petroleras tienen una buena excusa para aumentar el precio de la gasolina esta semana. Aunque en la última quincena se reflejaba una baja, ahora el barril de petróleo repunta, luego del plan de rescate financiero anunciado por la administración Bush.
Así las cosas, el congelamiento temporal decretado la semana pasada por el gobierno panameño, pasará el jueves probablemente a un incremento en el precio del galón de gasolina de entre 20 y 40 centésimos.
El barril de petróleo de Texas que sirve para establecer el precio de la gasolina en Panamá estaba ayer en 114 dólares. Pero cosa curiosa, las petroleras locales compran el combustible en Venezuela y Ecuador. Nadie aclara porqué se produce esa situación y el impacto de eso en el costo de la gasolina y diésel que compran los panameños.
Lo que si debe estar claro el gobierno es que debe entrar a explicar adecuadamente ese tema, porque los panameños ya se están cansando de tanto abuso a sus bolsillos.
Comprendemos que Panamá está a merced de los países productores de petróleo, pero lo que no se puede permitir es que localmente se inflen los precios, para obtener mayores ganancias. Como país que favorece el libre mercado, creemos en las utilidades razonables de las empresas, pero no en los excesos que acaban poco a poco los presupuestos del país, industrias y hogares.
Los funcionarios del Ministerio de Comercio deben dar la cara y no hacer como el avestruz, porque ya a la gente se le está colmando la paciencia.