Las autoridades de Vietnam elevaron ayer a 92 el número de personas fallecidas a causa de las inundaciones en el centro y el norte del país, mientras la capital vuelve poco a poco a la normalidad tras el cese de las lluvias.
Por primera vez desde el pasado sábado, los aguaceros dejaron de caer ayer sobre Hanoi, donde después del hallazgo de dos nuevos cadáveres, 22 personas han perdido la vida en las mayores riadas vividas en la ciudad en dos décadas, informaron fuentes oficiales.
En la anegada capital, la mayoría de escuelas y comercios permanecen cerrados pero sólo cinco barrios siguen inundados, indicó el alcalde, Nguyen The Thao.