Murió pidiendo una ayuda que nunca le llegó.
Francisco Humberto Fernández, un hombre de 28 años, con residencia en Santa Marta, en el distrito de San Miguelito, tal vez nunca se imaginó que el viaje de regreso de la provincia de Colón, sería el último de su vida. En fracciones de segundos perdió el control del auto BMW con placa 278176, cuando transitaba cerca a las esclusas de Pedro Miguel, en el lugar conocido como "Los Tres Lagos", en el corregimiento de Ancón.
El área del percance es una estrecha carretera rodeada por varios lagos y mucha vegetación, que ha sido en el pasado escenario de accidentes de tránsito, que incluso han costado la vida a varias personas.
"De noche, esto es una boca de lobo, donde no se ve nada", aseguró un curioso que presenciaba cuando alrededor de las 7: 00 de la mañana, de ayer, jueves, era sacado el cadáver de las aguas del lago.
En el lugar es notorio que la falta de luminarias y de barandales en la carretera que atraviesa Paraíso, puede resultar complicado para los conductores.
La tarde de la tragedia, Francisco, luego de caer al lago, logró ubicarse en la capota del auto y pedir auxilio diciendo que no sabía nadar, pero la falta de equipo de los primeros recatistas impidió la ayuda. Se informó que el hombre llegó a decir que se había quedado dormido al volante, por cuestión de segundos antes del accidente.
Los que estaban presentes sólo pudieron decir que el hombre se fue hundiendo poco a poco junto al automóvil.
Peligro
Personal de la ACP que cooperó en la búsqueda sostuvieron que los lagos son peligrosos, profundos y hábitat de reptiles y otros animales.
La esposa del hoy occiso, Leidy Osorio Batista, llegó al lugar y no dejaba de llorar. Mahammad Daris Shalabi, bombero quien sacó el cuerpo del agua, explicó que el mismo se encontraba aproximadamente a 15 metros de la orilla, por debajo de donde estaba el automóvil.