El presidente colombiano, �lvaro Uribe, dijo ayer que no puede aceptarse que la guerrilla de las FARC abuse de su colega de Venezuela, Hugo Chávez, y del acuerdo humanitario para la liberación de los secuestrados, en cuyas gestiones el gobernante del vecino país actúa como facilitador.
"No podemos aceptar que estos bandidos abusen del acuerdo humanitario, de los buenos oficios de los facilitadores, como el presidente Chávez, simplemente para hacer política, mientras que hacen terrorismo, para combinar las formas de lucha", afirmó Uribe.
El mandatario hizo mención del plan dinamitero de los rebeldes contra el gobernador del Cauca, Juan José Chaux, que fue descubierto por efectivos del ejército hacia la medianoche del lunes pasado en Popayán, la capital de ese departamento del suroeste del país.
Ratificó, igualmente, que está dispuesto a facilitar un sitio de encuentro de su colega de Venezuela con la guerrilla de las FARC, siempre y cuando sirva de escenario para un proceso de paz que sea exitoso.
Uribe condicionó la apertura de dicho territorio a la puesta en libertad, por parte de los rebeldes, de "unos secuestrados, con el compromiso de liberarlos a todos y se empieza un proceso de paz".
Así, precisó luego, "se puede crear un sitio de encuentro allá mismo en el Caguán (zona selvática en el sur del país) para que el presidente Chávez instale un proceso de paz exitoso con el terrorista Manuel Marulanda (jefe máximo de las FARC)".
"El presidente de Colombia no se negaría, en esas condiciones, a asistir (en el Caguán), podría ser, a una reunión posterior", continuó Uribe en su discurso.
El gobernante confirmó así el comunicado de la Casa de Nariño (sede del Ejecutivo) que precisó el martes las condiciones bajo las cuales el Ejecutivo de Uribe podía permitir una reunión.
PERSONAS: 45 SECUESTRADAS
Están en manos de la guerrilla de las Fuerzas Revolucionarias Colombianas (FARC), las cuales quieren cambiar por 500 guerrilleros presos.