El ex boxeador cubano Teófilo Stevenson, considerado el mejor aficionado de la historia, afirmó ayer en Montevideo, Uruguay, que no se arrepiente de haber rechazado numerosas y jugosas ofertas para desertar de la isla y hacerse profesional.
"Nunca me arrepentí. Y si volviera a nacer, haría lo mismo", declaró a periodistas Stevenson, medalla de oro del peso pesado en los Juegos Olímpicos de Múnich 72, Montreal 76 y Moscú 80, así como triple campeón mundial aficionado.
"La primera vez que me ofrecieron desertar, un argentino me dijo: si yo me gano 100.000 dólares, a ti te veo como un saco verde de millones", declaró Stevenson.
Stevenson llegó a Montevideo invitado por el presidente uruguayo, Tabaré Vázquez, que en su juventud practicó boxeo, y desde su Gobierno promueve el programa KO a las drogas de fomento a ese deporte en zonas carentes del país.