Los concejales capitalinos se mostraron a favor con el fallo de la Corte Suprema de Justicia, que hace obligatorio y de estricto cumplimiento la instalación de plantas de tratamiento de aguas residuales en las viejas y nuevas edificaciones construidas en la ciudad capital para evitar más la contaminación de quebradas, ríos y la bahía de Panamá.
La Sala Tercera de la Corte, en la ponencia del magistrado, Winston Spadafora, declaró que no es ilegal el Acuerdo No. 35 de abril de 2000, dictado por el Consejo Municipal y que exige a todas las edificaciones la instalación de sistemas de tratamiento para evitar que las aguas residuales sean vertidas al alcantarillado sanitario y demás afluentes.