El corte de mangas con el que Ruud Van Nistelrooy, jugador del Real Madrid, celebró su último gol sólo es inocente en Holanda y Alemania, mientras que en el resto del planeta fútbol es considerado una ofensa, como confirma un informe elaborado por las delegaciones de la Agencia Efe.El delantero holandés se extrañó cuando los periodistas le preguntaron a quien iba dedicado su corte de mangas y trató de explicar que sólo era un gesto de alegría.