La zona desvastada de Haití, más que un área de catástrofe, es similar a una zona de guerra donde la situación médica es caótica y la inseguridad reinante, aspectos evidenciados por galenos forenses panameños que estuvieron coadyuvando en el rescate y ayuda humanitaria en la isla caribeña.
El doctor José Vicente Pachar, subdirector del Instituto de Medicina Legal (IMEL), impresionado al describir el panorama de Puerto Principe, dijo que al menos no hay panameños víctimas de la tragedia y recomendó a las autoridades del SINAPROC dar atención médica y psicológica urgente a sus funcionarios al culminar las labores de rescate.
"La magnitud de la tragedia nos toca, hemos visto situaciones desgarradoras en las cuales a uno se le aprieta el corazón, nos toca espiritualmente y el miedo de las nuevas réplicas, no se podía dormir, sin alimentación, proliferación de moscas y mosquitos", señaló el subdirector del IMEL.
"Mi recomendación sería que enviar más personal debe ser evaluado con mucho cuidado, no sólo por las condiciones, sino porque para ir hacia allá se debe estar preparado, después de lo visto es algo jamás vivido", describió el forense.
Pachar dijo que la inseguridad era imperante, que a pesar de la presencia de efectivos norteamericanos y de otros países, la situación es similar a la vivida en el saqueo a Panamá durante la invasión en 1989.
La tragedia de las víctimas sobrevivientes ha llevado a los médicos a tener que hacer amputaciones con serruchos, a veces por médicos generales, casi como medicina de guerra.
El médico forense aseguró que los militares que permanecen en Puerto Príncipe no están para cuidar el orden público, y la garantía para los que trabajan y se desplazan en el rescate es de los propios grupos que tratan de salvar vidas.
Para el equipo de médicos forenses panameños que acompañaron a los rescatistas del Sistema Nacional de Protección Civil, los galenos dominicanos han sido descritos como "héroes", por su apoyo y resguardo de la seguridad de los funcionarios panameños.
Los médicos dominicanos que ya tienen más de 100 horas de labores trabajan en situaciones precarias, sin anestesia, con falta de cirujanos, ortopedas, medicamentos.
INJERENCIA POLITICA
La situación más allá del drama humanitario tiene una estela de protagonismo político por "la falta de coordinación internacional, por los diferentes intereses en juego que iban más allá de la ayuda humanitaria, y que tienen que ver con un juego político", criticó el doctor Pachar.
La misión de Panamá era de rescate y ayuda a panameños.
Pachar sostiene que es necesario que sean enviados médicos ortopedas.
Al menos hay 3 millones de personas afectadas, 100 mil muertos, 300 mil huérfanos, más las víctimas de enfermedades que ya estaban recluidas en centros hospitalarias.
"La situación se ha magnificado y es lamentable", finalizó diciendo Pachar, sobre el terremoto que sacudió a la República de Haití.
