La escogencia de la reina de carnaval no fue una novedad. Para muchos, la corona ya tenía nombre: Sorángel Matos.
Aunque se decía que Ingrid González podría llevársela, se vino abajo ese rumor al comentarse por las avenidas que se quería una reina negra y es que hacía 10 años que no se escogía una soberana de esta raza. Cuando llegó el momento del "Top 5", la González no figuró y fue la primera en darle la espalda al público, regresando a los bastidores.
Sorángel demostró ser una chica alegre y digna representante de los carnavales capitalinos. Al final, los jueces dieron su veredicto y el "�ngel negro" brilló sobre las demás.