Al menos cuatro personas murieron y una permanece desaparecida, tras una explosión previsiblemente causada por gas natural que destruyó varias casas ayer en la ciudad de Allentown, en Pensilvania, informaron los bomberos.
Robert Scheirer, el jefe del Cuerpo de Bomberos de Allentown, localidad unos 85 kilómetros al norte de Filadelfia, dijo a la televisión que 8 casas resultaron totalmente arrasadas por la explosión y el posterior incendio. Entre las víctimas había un bebé de 4 meses.