"Patrón, aquí le tenemos al hombre", estas palabras hicieron pensar a José Martínez que ese sería el último momento de su vida, antes de que fuera asesinado por los hombres que horas antes lo habían privado de su libertad en las afueras de su trabajo en Villa Lucre.
Sin embargo, el "Patrón", el jefe de la banda, le levantó la camisa que llevaba puesta y dijo "éste no es el hombre que estamos buscando".
Prácticamente los sujetos le perdonaron la vida a este hombre, a quien por equivocación le hicieron pasar el susto de su vida.
Los hechos se dieron el pasado lunes, a las 3:30 de la tarde cuando Martínez salió de su trabajo.