Luego de cuatro días de jolgorios, miles de panameños acuden a las iglesias en busca de la ceniza de la redención.
Con la unción de la ceniza, Dios perdona los pecados de sus fieles y les da una nueva oportunidad para convertirse y seguir el buen camino.
Para los penonomeños, el miércoles de ceniza es muy importante, porque la cruz que el sacerdote pinta sobre la frente es señal de arrepentimiento por todo lo que han hecho.
Para el sacerdote Saúl Gaona, guía espiritual de jóvenes, es importante la preparación para recibir esta cruz y es por ello que durante los carnavales el grupo que dirige dejan las fiestas de Carnaval para retirase a un lugar bastante apartado a orar.
En tanto, Uriah Ashley, monseñor de la diócesis de Penonomé, dijo que con la llegada de la Cuaresma los panameños deben convertirse y creer en Jesucristo.