Las autoridades estadounidenses solicitaron una investigación imparcial y la condena de los responsables de la explosión en un depósito de armas cerca de la capital albanesa que el pasado 15 de marzo, causó 24 muertos y 300 heridos.
"La Fiscalía debe emprender todas las acciones necesarias para esclarecer los hechos y llevar a las personas responsables ante la Justicia, independientemente de su estatus político", declaró el embajador de Estados Unidos en Tirana, John Withers.
Durante una reunión con funcionarios de Justicia, el diplomático estadounidense defendió que los tribunales albaneses dicten "sentencias merecidas" contra los culpables de la explosión, que destruyó miles de viviendas y negocios privados.
Confirmó que, a petición de las autoridades de Albania, llegó a Tirana un equipo de seis expertos de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) para ayudar a los fiscales albaneses encargados de las pesquisas.
La Policía publicó la lista con las identidades de los 24 fallecidos en este accidente, entre los que figuran un niño de 3 años y nueve mujeres.
En el depósito de armas, decenas de mujeres y menores de edad desmontaban, en precarias condiciones, decenas de toneladas diarias de cartuchos y de granadas antitanque y de morteros provenientes de polvorines de todo el país.
HECHOS: CATASTROFE
24 personas perdieron la vida en la explosión del depósito de armas.
Esta situación provocó la renuncia del Ministro de Defensa de Albania, por no cumplir con medidas de seguridad.