Unos mil 92 niños en Chiriquí ya no venden frituras, dulces, flores ni lavan autos.
Ahora cuentan con una beca de asistencia que les permite estudiar sin tantas dificultades económicas.
Dioselina Gaitán, directora Regional del Instituto para la Formación y Aprovechamiento de Recursos Humanos (IFARHU), explicó que a través de un programa de esta entidad han logrado sacar a estos niños de este problema en que estaban sumergidos.
Manifestó que sólo once de estos niños perdieron el beneficio, porque regresaron a las calles a vender y la condición es que el infante que tenga este beneficio no regrese a realizar estas labores de trabajo infantil.
La mayor parte de estos menores han respondido a los estudios de la mejor forma, en comparación con los que tienen hogares funcionales y viven con sus padres y que cuentan con toda esta atención.
MISION
El objetivo del programa es que los pequeños trabajadores regresen a las aulas de clases.
El programa dirigido a combatir y erradicar el trabajo infantil, por el momento ha dado muy buenos resultados.
En Chiriquí hay muchos niños que se dedican al trabajo infantil desde las duras tareas en el campo hasta la comercialización de productos en las calles.
Otros van a recoger latas en las festividades patronales y en los eventos feriales, lo que les permite tener un ingreso para su hogar.
PROBLEMA
La mayoría de los infantes, que son detectados trabajando, vive en extrema pobreza.
Algunos deben ayudar a sus padres, porque un solo ingreso no alcanza para el sustento del hogar.
Estos niños no asisten a la escuela por falta de recursos económicos y los que se observan en las diversas calles y áreas comerciales de la provincia de Chiriquí pueden alcanzar los diez y once años.
Aunque algunos anhelan estudiar y llegar a ser grandes profesionales, la precaria situación en la que viven no se los permite.
Muchos pequeños son miembros de familias indígenas numerosas.
Como ya no pueden trasladarse a las fincas cafetaleras, por las continuas inspecciones que realiza el Ministerio de Trabajo y el Ministerio de Desarrollo Social han optado por trabajar en las calles, dejando a un lado su infancia e ilusiones.