En la Cuba "comunista", se dice que el embargo impuesto por los Estados Unidos desde 1962, les ha costado 89, 000 millones de dólares (la suma de ochenta mil millones con 00
100), más las inconmensurables molestias a la sufrida población. Muchos panameños creen que este bloqueo contra Cuba, se dio y se mantiene por el totalitarismo y las libertades reprimidas en la isla con sus respectivas consecuencias de presos políticos en las mazmorras y por la falta de libertad de expresión. Yo que creo conocer a los gringos por las múltiples veces que traté con los de la Zona del Canal y de las bananeras, vendiéndoles equipos y servicios de mantenimiento, considero que la retención contra los cubanos es por plata y no por política ni los afamados derechos humanos. Si a Cuba le ha costado 89 mil millones de dólares este bestial torniquete, pregúntense ustedes, �en cuánto tendrán valorado los gringos, las empresas y bienes norteamericanos que fueron nacionalizados y expropiados por la "revolución" de los barbudos de Fidel? Y �cuánto consideran ellos que han perdido?.
Contadores públicos desautorizados, estiman que los intereses gringos y sus pasivos suman 1.1 billón de dólares, (mil millones de dólares más 100 mil millones más solamente), es por plata entonces y no por política el embargo.
Aún con la pequeña grieta abierta por Obama, en Cuba seguirán subsistiendo como hasta ahora, los afortunados que tienen "FE"(familiares en el exterior), y entre más "FE" se tenga la vida será mucho mejor, el resto seguirá tomando el mismo caldo y el taco de arroz sin comentarios divinos.
Con lo que ha vivido Cuba durante medio siglo, los pueblos del mundo y sobre todo nuestros despistados ñángaras criollos, deben aprender que por ahora con los gringos, se puede no estar de acuerdo , se puede hasta vivir sin ellos, pero jamás irnos contra ellos.
Sin embargo en Cuba, repetirán sus autoridades como siempre que están preparados y si usted le pregunta al pueblo también lo recitará, así como lo hacen las víctimas del síndrome de Estocolmo, que llegan a querer a sus secuestradores más que a su propia madre.