Siempre se ha sabido que la música es el refugio de las personas cuando se sienten tristes o sienten alguna inquietud. Esto no es la excepción en las personas de la tercera edad.
Y es que se recurre a la musicoterapia para atender cierta problemática.
Factores determinantes como la amenaza del acercamiento a la muerte, la herida del envejecimiento, entre otros, producen en cada anciano reacciones diversas, predominando sentimientos tales como aburrimiento, estancamiento, empobrecimiento personal.
Pero conoce usted lo que es la musicoterapia. Esta es una disciplina que estudia e investiga la relación del ser humano con el sonido, la música, el ritmo, etc. Es una especialidad que aprovecha una serie de recursos expresivos tales como la música, el sonido, el silencio, la palabra, la voz, el ruido, los gestos y los movimientos corporales para configurar una estructura integrada de expresión, promoviendo la salud fí�sica y mental.
Para aplicarla, se busca un espacio para que la persona pueda desahogarse y hacer lo que siempre ha querido: jugar y relacionarse con los sonidos que más le agradan.
El espacio musicoterapéutico es un ámbito en el que se promueve la manifestación emocional y en donde las percepciones, sensaciones y vivencias corporales, son el punto de partida para que la persona pueda encontrarse con sus propias posibilidades, su cuerpo y sus sonidos.
En el juego sonoro, la música puede actuar como disparador de nuevos pensamientos e ideas creativas. A partir del trabajo creativo la persona puede rehacer, recuperar o reconstruir su mundo pasado y presente.
Al momento de plantear las actividades, se tienen en cuenta las necesidades de cada persona tales como:
- El reconocimiento como individuo, con sus expectativas e inquietudes, las cuales se deben intentar satisfacer.
- Ser miembro activo, capaz y útil, considerando su capacidad fí�sica, mental y emocional.
- Oportunidad de autoexpresión.
- Claro, no pueden excluirse los sentimientos de valoración.
Téngalo siempre presente.