Un cargamento de 30 kilos de cocaína, procedente de Perú, ha sido incautado en la ciudad chilena de Talca, a 258 kilómetros al sur de Santiago, informó la policía.
La droga, cuyo valor comercial asciende a 327.000 dólares, estaba escondida en un porta-maleta de un camión que viajaba hacia la capital.
Los dos ocupantes del vehículo, un matrimonio del que no ha sido difundidas sus identidades ni sus nacionalidades, fueron detenidos y puestos a disposición de los tribunales.
Se presume que la cocaína, detectada con la ayuda de sabuesos, fue cargada en el camión en el puerto de la ciudad de Arica, fronteriza con Perú, y luego transportada a Talca para posteriormente ser comercializada en Santiago.