Los trágicos sucesos ocurridos la mañana de ayer lunes, quedarán imborrables en la memoria del sobrino de René De León Tapia, de 33 años. �l presenció cómo mataron a su tío de un balazo. Hay tres implicados en el crimen.
El suceso de sangre, bala y dinero, se suscitó en el cuarto 13 del viejo caserón de madera 8-A-12, localizado frente a Calle 17 de El Chorrillo, donde vivía la madre del hoy difunto.
La víctima laboraba como seguridad en el Domo de la Universidad de Panamá, en Curundu, y también se dedicaba a la venta de billetes clandestinos, dijo su hermana Kelly, quien no paraba de sollozar ante la impotencia de no poder reencarnar el cuerpo sin vida de su familiar a quien llamaba a gritos y por quien clamaba justicia.
René De León falleció tras defenderse de tres vulgares ladrones y dejó en orfandad a dos niñas de 6 y 8 años.
LOS DETALLES
Eran las 11:25 a.m. cuando tres delincuentes apodados "Tajadita", Reyna y "Tito" éste último de calle 19 Chorrillo, se apersonaron al domicilio de la víctima con armas de fuego en mano, pero sólo uno de ellos desfundó y disparó contra René De León impactandolo en la tetilla derecha, bala ésta que rozó su corazón y por ende, provocó su muerte, informó una fuente idóneo que impeccionó el cadáver.
Aparentemente la víctima forcejeo contra sus agresores y hasta le clavó un boligrafo en el cuerpo, pero aunque lucho por su vida, nada de esto sirvió para impedir su muerte, dijo uno de los moradores.
Según la información recabada hasta el momento por PTJ los homicidas residen en el corregimiento y dejaron una camiseta blanca manchada de sangre en calle 19.
Un pantalón de tela, largo de color gris y una camiseta blanca vestía la víctima quien fue bajada en camilla por personal de la Fiscalía Auxiliar en primera instancia, pero debido a lo inclinado que están las escalera se tuvo que utilizar una funda color verde para cargar el cadáver. el cual fue levantado a la 1:05 p.m.
La madre del ex empelado de la universidad escuchó la detonación, pero no pensó que se traba de un disparo y por eso no prestó atención y siguió cocinando.
Una gran cantidad de chorrilleros se volcaron a la calle para denunciar el homicidio ya que alegaron que no era justó que un hombre bueno fuera asesinado de esa forma. Aparentemente los mencionados por el homicidio son menores.