Martes 4 de mayo de 1999

 








 

 

 


Mireya es la cuarta viuda de líder que llega a Presidencia en Latinoamérica

Panamá
AFP - Crítica en Línea

Mireya Moscoso es la cuarta viuda de un líder político que llega a la máxima magistratura en América Latina, precedida por Estela Martínez de Perón en Argentina, Violeta de Chamorro en Nicaragua y Janet Jagan en Guyana, y la sexta mujer que llega al poder en el subcontinente.

Las dos que completan la nómina son María Eugenia Charles, en la isla caribeña de Dominica, y Lidia Gueiler, en Bolivia.

A los 52 años, Moscoso, viuda del tres veces presidente panameño Arnulfo Arias, es la primera mujer que llega a la presidencia de Panamá.

Janet Jagan ocupa la presidencia de Guyana tras una controvertida victoria en las elecciones del 15 de diciembre de 1997, en las que la oposición denunció fraude y que desataron violencia en el país.

Nueve meses antes, su esposo Cheddi Jagan, que había sido elegido para el período 1992-1997, murió sin poder culminar su mandato. Lo reemplazó en forma provisoria el primer ministro Samuel Hinds, quien a su vez fue sustituido por Janet Jagan.

Jagan, una estadounidense de 77 años, cofundó con su marido el Partido Progresista del Pueblo (PPP). Violeta Barrios de Chamorro, accedió a la presidencia de Nicaragua en 1990 y gobernó hasta 1997 al frente de la Unión Nacional Opositora (UNO), una coalición de 14 partidos que derrotó al Frentes Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) y al presidente Daniel Ortega, tras una década de régimen marxista y una guerra contrarrevolucionaria.

Viuda de Pedro Joaquín Chamorro, influyente director del diario La Prensa asesinado en 1978 por acional del entonces dictador Anastasio Somoza, Violeta Barrios fue miembro de la Junta de Gobierno sandinista que tomó el poder por las armas en 1979, aunque abandonó ese puesto por diferencias políticas.

Durante la era sandinista, hizo oposición desde la dirección del diario La Prensa.

María Estela (Isabelita) Martínez de Perón, tercera esposa del caudillo argentino Juan Domingo Perón, accedió a la primera magistratura de su país en julio de 1974, tras la muerte de su esposo, a quien había secundado en la fórmula presidencial elegida en los comicios de 1973.

Nacida en 1931, Isabelita cargaba con la sombra de la segunda esposa de Perón, Evita -erigida en mito popular tanto en vida como tras su muerte en 1952- y con la fuerte influencia de José López Rega ("el Brujo"), fundador de los tristemente célebres escuadrones de la muerte llamados "Triple A".

Isabelita fue derrocada el 24 de marzo de 1976 por un golpe militar encabezado por el general Jorge Videla. El saldo de su presidencia fueron 886 muertos en el último año de su gobierno y una inflación que alcanzaba un 330%.

María Eugenia Charles se convirtió en primera ministra de Dominica en 1980, dos años después de que esta colonia inglesa adquiriera su independencia. En 1985 fue reelecta y en 1990 volvió a obtener el voto de su pueblo para un tercer mandato consecutivo de gobierno.

La llamada "Dama de Hierro" del Caribe había aparecido junto al presidente Ronald Reagan cuando éste anunció al mundo en 1983 que tropas estadounidenses habían invadido la isla de Grenada, donde una facción disidente del partido marxista en el poder acababa de asesinar al primer ministro Maurice Bishop. Un destacamento de Dominica participó en la invasión. Lidia Gueiler fue presidenta de Bolivia entre noviembre de 1979 y julio de 1980, tras ser investida por las fuerzas políticas como una opción de conciliacion nacional tras un cruento golpe militar.

Gueiler presidía la Cámara de Diputados y pese a que no le correspondía por mandato constitucional, fue designada para reemplazar al derrocado presidente Walter Guevara Arce.

Durante sus ocho meses de gobierno, Gueiler debió enfrentar un proceso inflacionario, por lo cual dispuso la primera devaluación en siete años de pétrea estabilidad monetaria. Por el carácter transitorio de su gobierno, convocó elecciones para junio de 1980, ganadas por Hernán Siles Suazo.

Pero Gueiler se sometió a los dictados del alto mando militar, encabezado por su primo hermano, el general Luis García Meza, a quien ella misma promocionó, y quien la derrocó en un sangriento golpe de Estado.

García Meza hizo a Gueiler prisionera en la residencia presidencial y luego la obligó a renunciar públicamente y a optar por el exilio.

 

 

 

 




 

Multarán a personas por mal uso del vertedero de Natá

El pueblo pasó factura al Gobierno en triunfo de Mireya, dice Montezuma

 

PRIMERA PLANA | PORTADA | OPINION | PROVINCIAS | DEPORTES | LATINOAMERICA | COMUNIDAD | REPORTAJES | VARIEDADES | CRONICA ROJA | EDICIONES ANTERIORES


 

 Copyright 1995-1999, Derechos Reservados EPASA, Editora Panamá América, S.A.