Al menos 145 personas murieron en el tren siniestrado el pasado viernes en el estado indio de Bengala (nordeste), según los últimos datos oficiales dados a conocer ayer, una vez finalizadas las labores de rescate.
"El trabajo para recuperar los cadáveres de los vagones descarrilados ha terminado", dijo a la agencia india IANS, un portavoz de la compañía ferroviaria que cifró en 143 el número de heridos, 35 de ellos en estado grave.
Sin embargo, una fuente judicial citada por la agencia PTI explicó que las autoridades todavía están buscando a 25 personas que permanecen en paradero desconocido y no descartó que aún se encuentre algún cadáver entre los restos de los vagones.