La Fundación de Apoyo al Detenido denunció que existe un severo hacinamiento en la Sala 31 del Hospital Santo Tomás, la cual es utilizada para a atención de los reclusos que presentan problemas de salud.
Javier Justiani, encargado de esta agrupación, señaló que fuera del gran hacinamiento que se da en este sitio, los reos que llegan allí para ser atendidos corren el riesgo de ser contagiados de enfermedades pulmonares, ya que en la misma se internan a todos los detenidos sin clasificarlos por padecimientos.
Aunque reconoce que el HST no es un centro especial para la atención de reclusos, Justiniani insistió en que es éste es un derecho que no se le puede negar a ningún ciudadano y las autoridades deben procurar brindarle una adecuada atención a estos reos.
Destacó que en esa misma Sala se encuentran recluidos enfermos con SIDA, tuberculosis y otras enfermedades de transmisión, lo cual constituye un riesgo para los detenidos que llegan al lugar para ser atendidos y requieren ser hospitalizados.
La Sala 31 del Hospital Santo Tomás es especialmente para los presos que son remitidos al nosocomio por enfermedad, donde hay custodios vigilando a los reos.