Aunque su área de trabajo es un sencillo local, en donde opera una fotocopiadora, Mario Espinoza es el centro de atención entre sus compañeros y el público que atiende a diario. El motivo, su buen vestir.
�l lo atribuye a la diversidad de trabajo que ha tenido en el área hotelera, turística, publicitarias, medios de comunicación y espectáculos.
Dice que precisamente su trabajo lo ha motivado a preocuparse por estar siempre bien combinado y perfumado. "Siempre he dicho que no importa el lugar donde trabajes, siempre debes estar bien presentable porque no sabes en qué momento se va a dar una situación inesperada".
Y es que Mario ha trabajado en ventas, banquetes, agencias de viajes, mercadeo y en el Crucero Express, y años atrás estuvo muy involucrado en el mundo del espectáculo, por lo que para él es primordial estar siempre bien vestido para proyectar una buena imagen.
Admite que a todo el mundo no le cae bien "porque hay mucha gente que le incomoda ver a una persona que siempre está bien arreglada".
Este afán por el buen vestir lo ha llevado a tener una colección bien variada, entre la que tiene su ropa exclusiva para trabajar, para salir de noche y para los momentos especiales. Su debilidad son los zapatos, correas y perfumes.
Dentro de su ropero, Mario tiene 70 camisas que está usando actualmente y alrededor de 60 pantalones y 30 jeans, además de 6 maletas llenas de ropa usada que ya pasó de moda.
Hasta su ropa íntima es variada: bóxer, tangas e hilos dental, los que usa de acuerdo al tipo de pantalón que lleve puesto.