Mauricio Gutiérrez, de 49 años, murió.
Gutiérrez vivía en la apartada comunidad Bahía Honda, en Soná, provincia de Veraguas. Recientemente fue escogido por los habitantes como el vocero del Comité Pro-Defensa de los Campesinos por su coraje de enfrentar las injusticias contra los humildes.
Denunció los atropellos e injusticias en contra de las personas que han sido despojadas de tierras en las zonas costeras sur de la provincia, después de la creación del Parque Nacional Isla de Coiba.
"Sólo el coraje de la injusticia y el hambre que todos los días sufre mi gente es lo que me hace denunciar estas cosas", dijo en varias entrevistas a este medio.
Era un hombre principios, sencillo, honrado, luchador y pescador, interesado en el desarrollo social de Bahía Honda.
El vocero de los campesinos también denunció el derrame de miles de galones de combustible por una empresa extranjera en Isla Canales, igualmente los daños ecológicos y otros efectos en varias playas por la extracción de arena en las costas del sur de Soná.
Denunció la hambruna en comunidades como El Macho Abajo, y las plagas de ratones y purgones que atacan los cultivos de campesinos, que a la fecha no tienen respuestas de las autoridades.
Gutiérrez murió en el Hospital Luis "Chicho" Fábrega de un paro cardíaco.
En sus últimos días, Gutiérrez pidió-a través de varios medios de comunicación social-a las autoridades la oportunidad de desarrollar Bahía Honda con la creación oportuna de marina en Mamey que desea invertir más de 120 millones de dólares para convertir esa región en un lugar turístico con fuentes de empleos para cientos de personas de esa área que hoy están viviendo en condiciones precarias.