Los supermercados Canasta Básica en San Miguelito y Arraiján cerraron sus puertas porque "los consumidores no respondieron", aseguró ayer Enrique Athanasiadis, presidente de la Organización Nacional Agropecuaria de Panamá (ONAGRO).
En estos súper los precios estaban a un 20% más baratos, porque no había intermediarios, los productos se vendían del productor al consumidor.
Sin embargo, por día se estaba vendiendo entre $3 mil a $4 mil, lo que no resultaba rentable si se compara con los $5 mil que se hacen en cada una de las ocho tiendas que hay en Chiriquí, dijo el productor.
Indicó que se dedicarán a fortalecer y expandir las tiendas de Chiriquí y abrirán una sucursal de Canasta Básica en la provincia de Bocas del Toro.