Noche africana fue lo que se vivió en la Casona de Catedral, el pasado miércoles, con la presentación del grupo de baile Omoja.
Omoja se fundó en 1998 y tiene como finalidad promover la cultura africana a través de las danzas.
Esa noche se presentaron dos de sus cinco integrantes, Katia Nicolson y Janina Walters, quienes bailaron y explicaron con detalle el significado de las danzas que efectuaban, al público presente.
Ellas comenzaron danzando el "yankandy", un baile de Senegal dedicado a la Luna.
El "yankandy" es un tributo la Luna, como uno de los astros más emblemáticos de la cultura africana, nos explicó Walters.
La Luna para las poblaciones marcaba el momento de la recolección y riego de las cosechas e individualmente, en las mujeres, el momento de cortarse el cabello.
Seguidamente, las bailarinas ejecutaron la "moribayasa", un baile de acción de gracias por los favores recibidos.
El grupo Omoja realizará en octubre un taller de danza africana, en la Universidad de Panamá, dedicado a mejorar la energía de los danzantes.