Los padres de Lindsay Lohan ya no saben qué hacer y están tan preocupados que se han unido para poder ayudar a su hija.
El objetivo de la unión de la madre y el padre de la actriz es conseguir una orden judicial que les permita intervenir a la actriz, e internarla en una clínica de rehabilitación.
De acuerdo con Hollyscoop, la gota que derramó el vaso fue el escándalo provocado por la actriz la tarde del jueves en el hotel Bowery, en Nueva York, cuando en un arranque de furia lanzó una bandeja de servicio contra su novia, Samantha Ronson. La Policía fue llamada y Lohan fue expulsada del lugar.