El derrame constante de aguas con excremento humano y otros desechos descompuestos en las calles de Santiago, "es lo que pone en riesgo la salud de muchas personas", así lo aseguró Yolanda de Moutrhan, una comerciante molesta por la pestilencia que emana de una tubería, cerca de su negocio.
Dijo que los que tienen negocios de ventas de productos alimenticios cerca al Mercado Público, al igual que los almacenes, son los que más se ven perjudicados cada vez que se derraman los desperdicios que atraen las moscas, alimañas y el mal olor, por lo que las personas se alejan y no hacen las compras.
Arcadio Jordán, comerciante en el área de los derrames, informó a este medio que constantemente llaman al IDAAN, Ministerio de Salud y a la Alcaldía pero, nadie da respuesta de esta situación que cada día se agrava más por la cantidad de desperdicios con olores nauseabundos que salen del sistema de alcantarillado.
Explicaron que el agua sale con tripas de pollo, pedazos de carne putrefacta, excremento humano, residuos de restaurantes, entre otros, sin que nadie tome los correctivos para evitar que las personas que compran productos en el Mercado Público corran el riesgo de enfermarse.
Yolanda de Moutrhan manifestó que los comerciantes están preocupados y molestos por el problema, porque pareciera que las autoridades relacionadas a estos asuntos no les importa, por lo que piden que se haga algo al respecto, para evitar una contaminación masiva, ya que a pocos metros hay muchos locales de ventas de alimentos.