Después de más de dos años, la Selección de Panamá podrá desquitarse el próximo 8 de octubre en el Rommel Fernández, ante El Salvador, rival que la dejó afuera del Mundial Sudáfrica 2010.
El quedar apeada estará siempre en el corazón de toda la 'marea escarlata', la cual de seguro ya está preparada para alentar a los suyos en el Rommel y buscar una victoria ante los salvadoreños, quienes también serán nuestros rivales en la próxima Copa Uncaf, que se celebrará en nuestro país en el mes de enero.
No lo ve así. Para Julio Dely Valdés, estratega de la Selección, lo primordial es charlar con cada uno de los jugadores para ir inculcando su filosofía.
"Es un partido amistoso, pero tampoco podemos estar pensando en revancha", afirmó Julio -que debutará ante los cuzcatlecos-, tratando de quitar presión a sus pupilos, aun sabiendo la importancia que tiene este cotejo para el fanático istmeño.
En ese sentido, manifestó que el jugador no puede entrar pensando en los salvadoreños por lo pasado. "Son profesionales y ellos afrontarán el partido para ganar. El morbo hay que dejárselo al público", comentó el otrora del Nacional de Montevideo del fútbol uruguayo.
Cuestionado sobre si sería especial debutar ante el ya conocido El Salvador, Dely dijo: "�Por qué es especial? Lo bueno es iniciar el proceso. El Salvador no es especial".
Factor Rommel. Es seguro que el aficionado rojo quiere ver a Panamá ganarle a los salvadoreños.
Según Dely, la afición sí tiene muchas ganas de volver a encontrarse con El Salvador. "Este partido levanta mucho morbo y será especial para ellos", indicó el nuevo estratega de La Roja.
Jorge lo ve diferente. "Un Panamá-El Salvador es un partido que todo panameño quiere jugarlo", así contestó Jorge Dely, asistente técnico de La Roja y entrenador de las categorías menores (Sub-20 y Sub-17).
El ex del Rapid de Colorado del balompié de Estados Unidos dijo que siempre el fútbol da revanchas. "El sabor amargo de la eliminación del 2008 está todavía allí y algunos tomarán el juego como revancha", finalizó.