"Nadie sabe el sufrimiento de una madre". Eran las palabras de la mamá de Mario Ramiro Figueroa Sánchez, quien fue encontrado decapitado el domingo 16 de octubre, en la entrada de Aguadulce.
El cadáver de Mario fue recibido a las 9:30 de la mañana de ayer, jueves, frente al Ingenio La Estrella, en Natá, por sus colegas taxistas de Aguadulce, quienes lo acompañaron hasta la que era su residencia.
En la casa había más de 100 unidades de taxis y dos buses en donde llegaron los familiares del asesinado taxista, provenientes de San Carlos.
El cuerpo de Figueroa fue llevado a su residencia en donde se sentía el sufrimiento de todos los presentes.
A las 10:30 a.m. salió la carroza fúnebre en dirección a la Iglesia del Carmen, en Pocrí de Aguadulce, en donde fue escoltada por las unidades de taxi que se sumaron al dolor de los familiares.
El cuerpo de Figueroa fue llevado al cementerio de Pocrí. La viuda y madre no tenían consuelo.
Figueroa fue sepultado sin la cabeza la cual las autoridades continúan buscando.
La esposa defiende con fuerza que Mario era un hombre que vivía para su familia, y rechaza los comentarios negativos en su contra.
INVESTIGACIONES: ESPERAN JUSTICIA
Las investigaciones se encuentran en la Fiscalía de Coclé. La viuda dijo que confía en la palabra de las autoridades.