Familiares de 10 de las 18 víctimas fatales del incendio del autobús 8B-06 y cuatro sobrevivientes interpusieron ayer en Estados Unidos demandas millonarias contra dos empresas fabricantes del gas congelante que hacía funcionar el aire acondicionado instalado en el transporte colectivo.
De ganar los demandantes el litigio civil, estas empresas podrían ser obligadas a pagar más de 140 millones de dólares en indemnizaciones.
La demanda por daños y perjuicios fue interpuesta en la Corte Distrital del Condado de Finney, en Kansas, contra las empresas Northcutt Inc. y Oz Technology Inc., fabricantes del gas para aires acondicionados HC12A, y ambas con sede en Kansas City.
La información fue revelada en Panamá por Víctor Martínez, quien representa a los sobrevivientes Lidia Atencio y Luis Contreras, dos de los demandantes. Ambos piden 10 millones de dólares de indemnización a Nordhcutt y Oz Technology Inc., cifra similar a la que exigen Jorge Núñez, Margarita Sepúlveda y familiares de 10 fallecidos.
El uso del HC12A en aires acondicionados de vehículos a motor fue prohibido por el Departamento de Transporte de EE.UU. desde 1995 por ser altamente inflamable. Sin embargo, ambos fabricantes introducían el gas a Panamá a través de la empresa Mamut, S.A.
Peritajes realizados por la Policía Técnica Judicial en 2006 concluyeron que una instalación no profesional del sistema de aire acondicionado causó una chispa, que al entrar en contacto con el gas HC12A, generó un incendio que se diseminó rápidamente a través de los ventiladores.