No es cuestión de ser un animal en época de celos, los buenos amantes se distinguen por facultades tan sencillas como la sensibilidad para captar los sentimientos, necesidades y gustos de la pareja y el deseo de complacerla. No se trata de demostrar nada a nadie, sino de establecer buena comunicación con tu media naranja.
Siempre se ha dicho que la comunicación es una buena herramienta.