Dos de dos. Los panameños Antonio "Toñito" Araúz e Irving Diblasio que estaban nominados a varias categorías en los Premios Cristomanía de México salieron victoriosos.
Araúz se llevó el premio de la "Excelencia Musical", mientras que Diblasio arrasó con el "Mejor Disco del Año".
Lo mejor de todo fue que Araúz-Imbert se presentó con gran éxito en la Antigua Basílica de Guadalupe, donde hace más de un siglo no se presentaba ningún artista.
"Fue un regalo de Dios tocar en la Basílica, un gran honor porque hacía más de un siglo que nadie tocaba allí y Monseñor Pedro Agustín Rivera me dio ese honor", dijo.
Gracias a este logro, los panameños regresarán a México en el mes de febrero a una gira de conciertos.
