El mexicano Francisco Salazar Ramírez, de 35 año, fue detenido el domingo por las unidades de la Policía Nacional tras intentar escapar hacia Costa Rica.
La detención se dio en un retén policial en la frontera de Paso Canoa, entre Costa Rica y Chiriquí, cuando iba a bordo de una camioneta Toyota Prado, con placa 178062, junto con su chofer de nombre Néstor Julio Irriben. También iba otro ciudadano mexicano. Ahí se encontró una pistola 380 con 15 municiones.
Salazar Ramírez es supuestamente el coordinador de cargamentos de drogas hacia Panamá. Se le vincula al decomiso de unos 2, 283 kilos y 15 ametralladoras AK-47, realizado el pasado jueves en un taller de la Calle 2da. de Pedregal, ocultos dentro de varios camiones. Ahí se detuvo a 4 panameños y a un colombiano.
Los vehículos con la droga estaban a nombre del ciudadano mexicano, informó el Fiscal Primero de Drogas, José Abel Almengor, quien informó que Salazar Ramírez sólo tenía tres días de estar en el territorio nacional.
En la provincia de Chiriquí se presentó como la abogada del mexicano, Holanda Rosa Polo.
Almengor reveló que el sujeto en mención, según inteligencia, estuvo muy cerca de la ejecución del mexicano Carlos Rodríguez Morfin, ocurrida en un restaurante en la vía Porras.
ORGANIZACION CRIMINAL
Se conoció que la lucha contra el crimen organizado, denominada "Operación J-3.33", es coordinada entre la Policía Nacional y las autoridades colombianas.
Las investigaciones revelan que se trata de posibles células de las Fuerzas Armadas y Revolucionarias de Colombia (FARC) y miembros de "Bloque 57", que opera en la provincia de Darién, que trabajan en conjunto con el Cartel de Sinaloa.
Trascendió que se encuentra involucrado un reconocido �tumbador� de drogas de la localidad, quien estuvo recientemente detenido en La Joya, y quien es el que supuestamente se encarga de custodiar y brindar seguridad a los cargamento ilícitos que entran al país, reveló una fuente ligada a la investigación.
RUTA RED
La organización delictiva opera por todo Centroamérica, por medio de una ruta hasta llegar a los mercados mexicanos y norteamericanos.
La red tiene sus contactos en la ciudad capital desde donde se vigilan los cargamentos que entran al país. Las autoridades están tras la pista de los líderes.