El �rgano Judicial y otras instituciones públicas como la Policía Nacional, Sistema Penitenciario, Sectores Educativos y hasta la empresa privada, entre otras, aparecen dentro de un estudio como las áreas más propensas a la corrupción, flagelo que corroe los cimientos de la sociedad panameña.
Los informes sobre corrupción en diferentes áreas de la sociedad surgieron ayer durante el foro "Acciones Ciudadanas contra la Corrupción" realizado por el Instituto de Criminología de la Universidad de Panamá, en donde participaron representantes de varias organizaciones civiles.
El psicólogo Carlos González, del Instituto de Criminología, reveló que dentro de estas instituciones públicas y del sector privado, se dan variadas formas de corrupción que van desde la tradicional coima, utilización de bienes público para fines personales, agilización o retraso de trámites, evadir o disminuir pagos de multas, nepotismo, tráfico de influencias, deshonestidad y concusión, entre otras.
González indicó que la corrupción sistemática genera efectos perniciosos, como lo son; los costos económicos sobre la distorsión de los incentivos y recaudaciones fiscales, deteriorado de las instituciones públicas, y los costos sociales, pobreza, extrema pobreza, así como la paralización del desarrollo socio-económico del Estado.
Aseguró que se busca crear la oportunidad para dar a conocer las diversas actividades para que las organizaciones participen en contrarrestar la corrupción.