Las armas de fuego figuran como parte del elemento clave en crímenes o muertes por suicidios de chinos, panameños y colombianos, según se infiere de un informe elaborado por la Unidad de Análisis Criminal-Policía Técnica Judicial.
Pero toda regla tiene sus sagradas excepciones, y si hay dudas debe revisarse el homicidio del colombiano Efren Darío Sánchez.
El pobre paisa, reservista del ejército suramericano fue encontrado sin vida en un solitario paraje ubicado cerca del Club de Equitación-Clayton.
Sánchez presentaba golpes de consideración en diversas partes de su anatomía, en especial en la cabeza, producto de la actuación criminal de sus victimarios.
Otro caso pendiente de resolver lo es el del chino panameño José Antonio Lee Reyes, de aproximadamente 25 años de edad, quien presentaba una herida de bala en la sien derecha.
El cuerpo sin vida de Lee Reyes, fue encontrado dentro del apartamento 2a-del Edificio Excelsior Plaza, Calle 50, cuando uno de los residentes del inmueble tocaba la muerte, pero el comerciante jamás abrió.
Lee Reyes, estaba a punto de mudarse del lugar, reveló otra fuente.
Aparentemente Lee Reyes se quitó la vida al dispararse en la sien derecha con su pistola nueve milímetros, pero lo insólito es que el tiro le salió por la nuca.
En meses recientes otros paisanos de Kee y José han perdido la vida, y entre los cuales figuran figuran Suo Xiong-Lin, asesinado a tiros en Pan de Azúcar, Distrito de San Miguelito, el 11 de abril del presente año.
En iguales circunstancias falleció Fan Singua-Kin-Lau, muerto a balazos cerca de "Los Caminos de Omar" el 28 de abril. Aquí se registró un arresto, según fuentes oficiales.
Los homicidios siguieron con el deceso de Ching-Sun-Wan, acribillado a tiros en Curundú el 29 de abril del presente año, o sea crímenes en serie en un lapso de 24 horas.
Wai-Fung-Chin, quien pereció en Los Pueblos. Por supuesto con arma de fuego. Pereció el 2 de junio del presente año.Uno de los muertos tenía tatuaje en su cuerpo.