Resulta muy poderoso el deseo de escribirles sobre quien ha sido un héroe en la práctica de la medicina panameña, al cual he admirado mucho igual que a otros numerosos médicos, por su humanismo, don de caballero ejemplar y entrega total a la profesión.
El Doctor Thomas Owens, ha sido docente por muchas décadas de la Facultad de Medicina de la Universidad de Panamá, de la cual egresó con los más altos honores, siendo capítulo de honor Sigma Lambda. Todos los médicos renombrados y líderes de la medicina en ejercicio formados allí, pasaron por las aulas del Dr. Owens. Era tal su brillantez académica, que le era difícil tolerar la mediocridad o la falta de entrega en la práctica médica. Como nos decía alguna vez, cuando comentábamos del uso incorrecto de una terapéutica: "no le perdono esa falla si ese colega es egresado nuestro", marcando su profundo orgullo docente y la seguridad con la que expresaba, que "en Panamá se forman los mejores médicos del continente".
Fue parte de los socios fundadores de la Sociedad de Medicina General y apoyó la creación del Servicio de Geriatría de la Caja de Seguro Social. Pasó no sólo de competidor en el deporte de las pesas, sino como pionero de la medicina deportiva panameña y fue un demócrata civilista consumado, y padre creador de la innovadora especialidad de Medicina Familiar en Panamá.
Cada día más, jóvenes médicos como yo, ven en el retorno de la práctica médica, centrada en la gente y no en órganos enfermos; la solución esencial del sistema de salud panameño.
El maestro de maestros, Dr. Owens, se caracterizó por no ser un hombre conflictivo, fue pausado, pero firme en sus principios, con una elegancia a lo irlandés, irradiaba cariño hacia sus pacientes y conocidos. Lo reconocían como "el ombusdman de los pacientes".
Ahora que ha fallecido, sólo puedo enorgullecerme, recordando una reciente conversación, cuando me ha estrechado mi mano con cariño una anciana y me dice: "gracias doctor, Usted es muy bueno porque nos toca. Es cariñoso, no es frío ni distante... �Me recuerda a mi médico que se jubiló! �Conoció Usted al Dr. Owens?". Respondiendo honrado: "Sí, fue mi maestro".
He aquí mi humilde tributo, al médico que más he admirado y quien es fuente de inspiración para los que amamos la profesión, esperando ser usados como "instrumentos de la paz de Dios" como me señaló alguna vez, recordando a San Francisco de Asís. Un abrazo solidario a su esposa Criseida, hijos y familiares.
