En Los Cántaros, los residentes ya no aguantan a los ladrones.
Según una moradora del área, no se puede dejar nada en el patio de las casas, ni las ventanas ni puertas medio ajustadas, porque delincuentes de la comunidad se meten y se llevan todo lo que tengan a su alcance.
En ocasiones llegan a las casas vecinas a vender lo que se robaron al lado.
Los moradores de Los Cántaros piden que la Policía manden rondas al área para controlar un poco la proliferación de los maleantes.
Pero algunos policías dicen que no van porque a veces los llaman para "tonterías", como por ejemplo, una vecina que no le habla a la otra, le manda la Policía para molestar, y cuando se dan casos realmente graves, no creen que sea cierta la denuncia, por lo cual piden a los habitantes que sean más serios al momento de llamar.