A pesar de las reivindicaciones sociales de la clase trabajadora, en pleno siglo XXI muchos trabajadores son sometidos a injusticias; tal es el caso de los docentes provenientes de la otrora Escuela Náutica, pilar donde nace la Universidad Marítima Internacional de Panamá (UMIP).
La Ley 40 de 2005 hace responsable a la Junta Directiva de la UMIP de la elaboración del estatuto orgánico y de su posterior aprobación. Sin embargo, esta tarea fue delegada al rector capitán Orlando Allard. Quiero aclarar que ahora mismo la Junta Directiva ha incumplido con la Ley 40, ya que ha quedado en mora con la elaboración del estatuto. El Ministro de Educación solicitó al Rector que designe la comisión encargada de elaborar el Proyecto de Estatuto Orgánico.
Esta Comisión trabajó durante todo un año con el objetivo de la culminación de tan importante documento. En reuniones con la administración del señor Rector se añadían artículos inconsultos en varios borradores; no obstante, se le advirtió a través de notas y de manera verbal, que nos teníamos que ceñir a la Ley 40. El 14 de marzo se firma un finiquito, acto público entre todo el personal incluyendo estudiantes entre el rector capitán Orlando Allard y mi persona como representante de los profesores.
Hoy los miembros de la Junta Directiva de la UMIP, de la cual el Rector es parte, niegan lo consensuado. Exhorto a la Junta Directiva, al Ministro de Educación, al Administrador de la AMP, al Administrador de la ACP, al Director Ejecutivo de la Fundación Ciudad del Saber, al representante de la Cámara Marítima de Panamá, el Presidente de la Asociación Panameña de Oficiales de Marina , al representante de la Asociación de Derecho Marítimo, al Contralor de la República y al Rector a que depongan sus intereses y no se empañe la transparencia y la democracia.
Hacemos un llamado al señor presidente Martín Torrijos para que interponga su buena fe y haga un llamado al diálogo y al consenso (El autor es miembro de la Comisión de Elaboración y Revisión de Estatutos Orgánicos UMIP).
