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A ORILLAS DEL RIO
LA VILLA
�Por qu� Azuero? (Final)
Santos Herrera
Cuando se refiri� a nuestra poblaci�n geogr�fica dijo: "Parece que si el mundo hubiese de elegir su capital, el Istmo de Panam� ser�a se�alado para este augusto destino, colocado, como est� en el centro del globo, viendo por una parte el Asia y por la otra el Africa y la Europa". Y "qu� bello ser�a que el Istmo de Panam� fuese para nosotros lo que el de Corinto para los griegos. Ojal� que alg�n d�a tengamos la fortuna de instalar all� un augusto Congreso de los representantes de las rep�blicas, reinos e imperios a tratar y discutir sobre los altos intereses de la paz y de la guerra, con las naciones de las otras partes del mundo". Al conocer el Acta de Independencia de Panam� en Espa�a 1821, le dedic� elogiosos comentarios y la present� como modelo a las dem�s naciones americanas. Sim�n Bol�var estaba plenamente convencido que la Am�rica que llegaba hasta R�o Grande, s�lo unida podr�a enfrentarse a los imperios, que no ocultaban su inter�s en someterla. Por eso sosten�a que... "Es una idea grande pretender formar de todo el Mundo Nuevo una sola naci�n con un solo v�nculo que ligue sus partes entre s� y con el todo. Ya que tiene un origen, una lengua, unas costumbres y una religi�n, deber�a tener por consiguiente un solo gobierno que confederase los diferentes Estados que hayan de formarse". "Yo deseo m�s que otro alguno formar en la Am�rica la m�s grande naci�n del mundo, menos por su extensi�n y riqueza, que por su libertad y gloria". Al Libertador Sim�n Bol�var se le puede estudiar por m�ltiples lados, de muchas formas, por diversos caminos, en distintos frentes. Su vida pr�diga y turbulenta, audaz y vertiginosa, de tribuno y de maestro, de militar y pol�tico, de libertador y estadista, de sic�logo y pensador, de t�cnico y financista, presenta diferentes caras, variados rostros, cambiantes posturas, aspectos divergentes, comportamientos complejos, que forman un juego de luces y contraluces, de sol y sombra, que confunden al historiador. Sim�n Bol�var es un pluralismo humano y vital, y es al mismo tiempo una vor�gine de contrastes. Unos lo han enaltecido hasta la c�spide de la fama, otros lo han rebajado hasta el abismo de la deshonra. �No tenemos los paname�os una deuda de gratitud con el Libertador Sim�n Bol�var? �Por qu� son tan pocas las plazas, escuelas, avenidas y calles, que llevan su nombre? �Por qu� ning�n sitio geogr�fico tiene como nombre el de Sim�n Bol�var? Consideramos que ha llegado la hora de hacer justicia y �sta solamente se lograr� cuando se cambie el nombre de la Pen�nsula de Azuero, por el de Pen�nsula Bol�var.
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