Aunque haya pasado más de medio siglo del asesinato del presidente Coronel José Antonio Remón Cantera, creo que el pueblo panameño debe saber lo sucedido, especialmente los jóvenes.Siempre recuerdo aquel pensamiento de Santayana, que señala que �quienes olvidan la historia estarán condenados a repetirla�. Eso no lo deseo para mi país, por supuesto.
Con el tiempo cinco hipótesis (explicaciones posibles) envolvieron el misterio de la muerte del presidente militar panameño.
La explicación �más lógica� es que fue un asunto de drogas con la mafia internacional. Según este supuesto, Remón era un obstáculo para el libre flujo de drogas por Panamá y por eso lo liquidaron.
Basan esta hipótesis en lo bien planeado que estuvo el atentado, el uso de un arma militar que necesitaba alguien con destreza y supuestos incidentes previos. Incluso se habló con una maleta con drogas que supuestamente tenía la primera dama...
Otra idea sobre el �magnicidio� fue que se trató de una conspiración de un sector de la oligarquía panameña, desplazada del poder por el Coronel Remón.
Uno de sus argumentos es que se juzgó primero al supuesto �autor intelectual� que quien disparó. Se justifica este �error judicial� en que había sectores que no querían al ingeniero José Ramón Guizado en la presidencia.
Tercera hipótesis se refiere a que el golpe vino de la misma Policía, cansada del poder de Remón quien pudo reelegirse ya que tenía todo el control del país.
Señalan que Remón era �un tapón� que detenía el ascenso de militares ambiciosos de poder. Por eso lo eliminaron y borraron todas las huellas para que el crimen quedara sin solución.
Una cuarta hipótesis (más débil) es la que señalaba que lo ocurrido pudo haber sido una venganza, �pase de factura� de los arnulfistas.
Tiene como fundamento que Remón �traicionó� al Dr. Arnulfo Arias. Lo tumbó �a sangre y fuego�, luego que hizo que se recontaran los votos y lo declararan presidente.
Finalmente existen personas que sugieren que los Estados Unidos pudo tener algo que ver en el atentado. Se basan en que Remón logró un Tratado, que aunque fue ventajoso para Norteamérica, señaló su liderazgo nacionalista en las cuestiones canaleras.
Por muchos años estuvo en bronce la frase de Remón durante las negociaciones con Estados Unidos: �Ni millones ni limosnas, queremos justicia�.
Ojalá aquellos que estuvieron en el asesinato de Remón si los hay o los que saben la verdad, antes de morir la hagan pública. �Panamá merece conocer la verdad de ese bochornoso hecho!