La fuerte tormenta de nieve que azota desde el viernes el área de Washington ha dejado paralizada la capital, ha causado ya al menos dos muertos y numerosos accidentes y mantiene a cerca de 200, 000 personas sin electricidad.
Las autoridades han declarado respectivos estados de emergencia en la capital estadounidense y los estados vecinos de Virginia, Maryland, Delaware y Virginia Occidental.
El servicio de autobuses se encuentra suspendido y los aeropuertos están cerrados. El sistema de Metro ha dejado de operar en las estaciones no subterráneas. Algunos hospitales en áreas periféricas han pedido voluntarios propietarios de vehículos todoterreno para que transporten a médicos y enfermeras.