|
EDITORIAL
Arroz y contrabando
El lío en torno al arroz que se comercializa en las ferias libres de los políticos del patio, merece una adecuada aclaración por parte de las autoridades del Ministerio de Desarrollo Agropecuario y la Dirección General de Aduanas.
Los productores alegan que hay un excedente de 133 mil quintales de arroz y han denunciado el supuesto ingreso de un cargamento procedente de Costa Rica, sin el correspondiente pago de impuestos.
Las denuncias están planteadas. No hay que romperse la cabeza para poder identificar si el arroz que se comercializa en las aludidas ferias es producción nacional o procede del extranjero.
Una simple investigación del MIDA en los molinos y empacadoras de arroz, así como una adecuada labor de los inspectores de Aduanas, puede revelar todo lo relacionado a este caso, cuya aclaración se viene dilatando y amenaza con convertirse en otro de los tantos escándalos que sacuden a Panamá. El arroz lo venden los mayoristas entre 27 y 32 balboas el quintal. En las ferias, el grano se vende a 20 centésimos la libra.
Es evidente que el precio ofertado al público es sumamente inferior al que ofrecen los propios distribuidores al por mayor. Frente a esos hechos hay tres posibilidades: que el vendedor esté subsidiando con plata de su bolsillo el precio, que el arroz alguien se lo regala o que el grano en efecto ingresó de contrabando.
Las autoridades deben aclarar de una vez por todas la situación. El que tiene pruebas que las presente ante el Ministerio Público, de lo contrario, dejen de alarmar innecesariamente.
Ante el dilema, los nacionales más humildes esperan que no haya nada irregular en la venta del arroz barato, porque las ferias constituyen un lugar donde pueden comprar a precios de ahorro, uno de los alimentos básicos en la dieta de los panameños.
Arroz barato sí, Contrabando no, debe ser la consigna porque de lo contrario estaríamos frente a un delito, que debe ser perseguido por las autoridades, aunque éstas a veces sean como la cómica de los monitos: "no ven, no escuchan, ni hablan".
|
PUNTO CRITICO |
 |
|