Acorde a su fama de rompecorazones, Lenny Kravitz puso en escena sus mejores armas de seducción para conquistar al público argentino el sábado por la noche en el estadio la ``Bombonera'' de Boca Juniors.
Kravitz, de 40 años, demoró casi una hora el comienzo del concierto, pero la espera tuvo su efecto porque cuando ingresó al escenario generó una explosión de aplausos y gritos de las 35.000 personas.