El antesalista Alex Rodríguez (.314, 54 jonrones y 156 carreras remolcadas) ganó su tercer premio al Jugador Más Valioso y parecía que se iba a otros lares al hacer uso de una opción que le permitía declararse agente libre. Se encontró con la realidad de que casi nadie estaba dispuesto a pagarle lo que pedía, por lo que al final aceptó un contrato de 275 millones.